A nivel mundial, las acciones para revertir el cambio climático, sus impactos actuales y potenciales, requieren de inversiones financieras importantes por parte de gobiernos y empresas.
México, se considera un país altamente vulnerable a los efectos del cambio climático debido a su ubicación geográfica y a sus condiciones socioeconómicas.
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) ha creado una Estrategia de Movilización de Financiamiento Sostenible, tomando diversas medidas, como alinear el Presupuesto de Egresos de la Federación con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), el diseño de un Marco de Bonos Soberanos ODS que permitan desarrollar cuatro mercados de deuda sostenible; entre otros.
Es el caso que, en el marco de la Convención Bancaria 2023, el Subsecretario de Hacienda, Gabriel Yorio, presentó la “Taxonomía Sostenible de México”, una herramienta elaborada para establecer un marco de referencia a nivel nacional que permita clasificar de manera clara, confiable, legítima y con bases científicas, actividades y proyectos de inversión de sectores clave para la economía, como son la generación, transmisión, distribución y comercialización de energía eléctrica, el suministro de agua al consumidor final, transporte, agricultura, cría, explotación de animales, aprovechamiento forestal, construcción, industrias manufactureras y manejo de residuos y servicios de remediación; que cumplan con criterios sólidos de sostenibilidad, para lo cual se definieron objetivos generales y objetivos medioambientales y sociales que delimitan el propósito y alcance de la misma.
Esta herramienta reglamenta, promueve y facilita la movilización de capitales hacia actividades productivas con impactos medioambientales y sociales positivos, a fin de brindar mejor información, certidumbre y transparencia al sistema financiero mexicano, contribuir al cierre de brechas sociales, la reducción de las emisiones contaminantes y las vulnerabilidades ante el cambio climático.
Tomando como base la Taxonomía se pretende reflejar las prioridades nacionales en la materia, considerando el estado de desarrollo tecnológico y capacidades productivas del país, al mismo tiempo que se da cumplimiento a los compromisos internacionales de México en materia de sostenibilidad, incluyendo las Contribuciones determinadas a Nivel Nacional (NDC) y los ODS de la Agenda para el Desarrollo 2030.
En su primera etapa, la Taxonomía se enfoca en desarrollar tres objetivos principales: cambio climático, igualdad de género y acceso a servicios básicos relacionados con las ciudades sostenibles.
Este documento contiene información sobre su proceso de creación y desarrollo, así como los criterios de evaluación técnica[i] (CET) para los objetivos climáticos (adaptación y mitigación del cambio climático), y de igualdad de género para esta primera etapa.
Asimismo, se incluyen 124 actividades elegibles en seis sectores económicos y sus respectivas métricas, alcances y criterios de no daño significativo.
Para el objetivo de Igualdad de Género, se diseñó un índice a partir de preguntas guía, basadas en tres pilares eje: Trabajo Digno, Bienestar e Inclusión Social.
Medioambientales | Sociales |
• Mitigación al cambio climático • Adaptación al cambio climático • Gestión de los recurso hídricos y marinos • Conservación de los ecosistemas y la biodiversidad • Impulso a la economía circular • Prevención y control de la contaminación | • Contribución a la igualdad de género • Acceso a los servicios básicos relacionados con las ciudades sostenibles • Salud • Educación • Inclusión financiera |
- Elegibilidad de actividades incluidas en la Taxonomía,
- Alineación de actividades elegibles bajo métricas y alcances,
- Cumplimiento de los criterios de no daño significativo[i], y
- Cumplimiento de las salvaguardas mínimas[ii]
[i] Criterios de Evaluación Técnica (CET). – Son el conjunto de lineamientos que permiten evaluar e identificar actividades económicas consideradas como sostenibles. Los CET deben tener una base científica sólida e incorporar las mejores prácticas en la materia.
[ii] El principio de No Daño Significativo (NDS). – Se compone de una serie de criterios medioambientales que permiten asegurar que una actividad económica, con contribución sustancial, no tenga efectos negativos en ninguno de los otros objetivos de la Taxonomía, distintos al parámetro principal. De esta manera, se asegura que el progreso en algunos objetivos no se haga a expensas de otros objetivos medioambientales. Los principios de NDS son definidos para cada actividad económica y están basados en la legislación, regulación, normas o estándares existentes operables en los sectores en cuestión.
[iii] Salvaguardas Mínimas. – Buscan cubrir temas relacionados con derechos humanos, así como buenas prácticas internacionales en materia laboral y gobernanza. De esta forma, definen elementos mínimos requeridos para el desarrollo de una actividad económica alineada con la Taxonomía. Estos elementos de obligado cumplimiento están definidos por las leyes y normas vigentes de México, y las convenciones y directrices internacionales.
Paola Rodríguez
Consultora Senior